La doctora Fresno le dijo a la mujer que ella les ayudaría a conseguir la vivienda social que necesitaban.Ninguno de la familia tenía confianza en que así fuera y se lo hicieron saber a la doctora con gritos y palabras poco agradables.La doctora no perdió la calma en ningún momento y les aseguró que el tiempo diría quién tenía razón.
La doctora Fresno prosiguió sin perder la calma ni un solo momento, hasta que llegó la mujer e tervino diciendola:
- ¡ A mi me da igual lo que usted diga, lo único que se esque quiero mi vivienda! le responde la doctora:
- ¡ Joder señora! ¡ Le estoy diciendo que en este momento es imposible conseguirle la vivienda que necesitan coño! le respondio la doctora.
En definitiva siguieron postergando la conversación suviendo el tono de voz sin limite ninguno,
hasta que llego un momento de que la mujer puso fin a la conversación diciendo a la doctora:
- Doctora voy a darle un voto de confianza y voy a dejarla hacer su trabajo, para que así nos ayude a conseguir nuestra vivienda, respondio la doctora:
- Me parece bien, que usted me aga hacer mi trabajo, me gusta que la gente sea respetable en mi trabajo y me deje hacer las cosas a mi manera, de todas formas le agradezco su colaboración.
Así acabó la conversación, quedandose de acuerdo entre ellas dos y asi poder realizar e intentar conseguir a la familia su vivienda social que tanto necesitan.
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